La Defensora Pública del Fuero Penal de Luque, Leidy Morales Clemotte, representó en juicio a 3 personas acusadas de haber cometido amenaza, violación de domicilio, daño y maltrato físico hacia una mujer. Luego de que la defensa presentara las pruebas correspondientes, el Tribunal de Sentencia de Luque declaró no probada la existencia de los hechos y absolvió de reproche y pena a los asistidos por la defensa pública.

Una noche invernal, Fernando y Aníbal jugaban a la pelota frente a la casa y despensa de Porfiria. En medio del juego de los niños, en un descuido, la pelota dio contra la ventana del negocio, aunque el cristal no se rompió, el sonido fue tan fuerte que asustó a los dueños –Porfiria y su marido- quienes salieron a la calle a llamar la atención a los niños, mandándolos a sus casas.

Minutos más tarde, los padres de los niños; Jazmín, Carlos y Lucía, se acercaron hasta la casa de Porfiria para saber lo que ocurrió. Luego de una incómoda conversación esa noche, Porfiria y su marido querellaron a los padres de los niños por amenaza, violación de domicilio, daño y maltrato físico.

Como Jazmín, Carlos y Lucía no tenían recursos para pagar un abogado privado, acudieron hasta la defensoría de Luque en donde fueron asistidos por la defensora pública, Leidy Morales Clemotte, quien al darse por enterada del caso y en vista a que el mismo ya se encontraba en etapa de juicio oral y público, planteó varios incidentes, entre ellos, incidente de nulidad de la presentación de la querella y en consecuencia todos los actos que deriven de ella. 

Posteriores pruebas producidas por la defensa, entre ellas un video de circuito cerrado, no se pudo probar la existencia del hecho punible. En consecuencia, el Tribunal Unipersonal de Sentencia de Luque resolvió declarar no probada la existencia de los hechos punibles y absolvió de reproche y pena a los asistidos por la Defensa Pública. 

Defensora Pública del Fuero Penal de la ciudad de Luque, Leidy Morales Clemotte.

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