Luciano es padre de 2 pequeñas niñas y vive junto con Celina, su esposa, en el extremo Norte del departamento de Paraguarí, aproximadamente a unos 50 km de Asunción. La pareja acostumbra a llevar a sus hijas a la casa de una tía –hermana de Celina- para que las cuide mientras ellos van a trabajar.

Un día Celina dejó a sus hijas en casa de su hermana y fue al trabajo como cada día. Lo mismo hizo Luciano, se levantó como de costumbre, se alistó e inició su día como cualquier otro. Al llegar a su casa se encontró con la sorpresa de que la policía lo buscaba por una denuncia penal en su contra, presentada por su cuñada. Él fue aprehendido y acusado por la comisión de un supuesto hecho punible.

En principio, a Luciano lo representó un abogado privado, ya que le dieron arresto domiciliario, pero fuera de la vivienda donde residía, lejos de su familia. Más tarde, por falta de recursos económicos para seguir pagando los honorarios de un abogado, recurrió a la defensa pública para que lo representaran en juicio oral y público.

El defensor, Hugo Servin, presentó ante el Tribunal las declaraciones como anticipo jurisdiccional de pruebas, en el que las personas afectadas negaron ser víctimas del supuesto hecho cometido. En juicio, también se presentó el informe victimológico que no acreditaban daños psicológicos en las víctimas; además, la declaración de la esposa que negaba en todo momento la denuncia hecha por su hermana.

Debido a que la mujer que hizo la denuncia no se presentó a testificar, el Tribunal valoró este hecho junto con las pruebas presentadas por la defensa y por insuficiencia probatoria resolvió absolver de reproche y pena a Luciano.

Defensor Público Multifueros Interino de Alto Paraná, Hugo Servín.

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